CALENDARIO CLASES 2009-2010

miércoles, 30 de septiembre de 2009

¿CÓMO REDACTAR BIEN?


QUÉ DECIR


La primera regla para redactar bien es saber QUÉ SE VA A DECIR. Para ello, según el tema, debes basarte en diversos aspectos de tu experiencia vital:



    • OBSERVACIÓN DIRECTA. En este punto deberías estar describiendo algo o narrando algo que sucede en el presente, aunque tu idea sea contarlo en cualquier otro tiempo. Con este punto, deberías conseguir un texto creíble, pues te estás basando en la realidad.


    • CONOCIMIENTOS TÉCNICOS. En este apartado, te basarás en aquello que ya sabes sobre el tema expuesto o buscarás la información en las fuentes necesarias. Este punto suele ser muy útil para redacciones que impliquen la exposición de textos en exámenes y/o trabajos. Por ello es muy recomendable hacerse un esquema del contenido.


    • IDEAS BASADAS EN LA EXPERIENCIA. Aquí deberás hacer un esfuerzo por recordar aquellas situaciones vividas que puedan servir como medio de inspiración, sobre todo en aquellos textos en que se te pide contar o narrar algo, ficticio o real. No olvides que los personajes más reales están en la vida misma.


    • OPINIONES. A veces no se te pide que cuentes nada, si no que razones, que des argumentos a favor o en contra de aquello que has leído. Es muy importante que cumplas una regla básica: coherencia y respeto. Los argumentos deben ser tener tanta fuerza que tú creas que puedes convencer a quien tienes delante. No vale decir “porque me gusta” “porque es bonito/feo/divertido/aburrido”. Cualquier opinión es válida, siempre y cuando el respeto los argumentos sean la idea principal del escrito.



CÓMO ORGANIZAR LA INFORMACIÓN.


Una de las cosas más importantes en un texto es que contenga TODA LA INFORMACIÓN que deseamos incluir. Para ello disponemos de herramientas:

    • LLUVIA DE IDEAS. Cuando no tienes un referente, es decir, un texto o una información en la que basarte, debes anotar, en un principio, todas aquellas ideas que te vengan a la mente de forma desordenada. Después, te dará cuenta de que hay varias que te son inútiles, otras que se repiten de diferente manera, unas que se complementan y se pueden agrupar en una sola que es la importante. Todas ellas están ahí para algo, pero al final sólo has de usar las que tengan que ver con el tema que se te ha propuesto y las has de organizar de manera ordenada siguiendo una pauta: primero, hay que escribir las ideas principales; luego se explican los términos secundarios. Esta técnica es muy útil cuando se te exige un ejercicio de imaginación. Si tienes que trabajar en grupo, es una forma de que cada uno aporte su idea y de que todas salgan. No olvides que cuantas más cabezas piensen, más completo es el texto.


    • ESQUEMA. Para tener una información clara, completa y ordenada es imprescindible que no olvides crear primero un esquema con todas las ideas que has recogido. Si te has basado en un texto que debes estudiar, primero lo habrás leído un vez, luego lo habrás subrayado y habrás anotado en el margen con pocas palabras una idea que resuma el párrafo. En una tercera lectura irás escribiendo en un papel los conceptos generales y lo completarás con apartados secundarios que deberían corresponder a los puntos seguidos de cada párrafo. A veces, no se corresponden exactamente, porque se repiten, no aportan ideas nuevas. En este punto, pueden pasar dos cosas: si lo que estás leyendo está bien escrito quiere que te quede bien claro lo expuesto en las líneas; en el caso contrario, es un error de cohesión.


LOS TERTULIANOS CONVERSAN